El Dr. José Luis Marín afirma “La mayoría de las personas que toman antidepresivos no los necesitan”

uso de antidepresivos

El uso de antidepresivos se ha generalizado de forma preocupante en las últimas décadas, hasta el punto de que una parte significativa de las personas que los consumen podrían no necesitarlos. Así lo afirma el psiquiatra y psicoterapeuta Dr. José Luis Marín, una de las voces más críticas y experimentadas del ámbito de la salud mental en España, con más de 40 años de trayectoria clínica y docente.

Sus declaraciones, recogidas recientemente en El Confidencial, han reabierto un debate clave: ¿Estamos medicalizando el sufrimiento emocional en lugar de comprenderlo y abordarlo terapéuticamente?

Un referente en psiquiatría y psicoterapia integradora

El Dr. José Luis Marín es médico psiquiatra y psicoterapeuta, formado en la Universidad Complutense de Madrid y especializado en psiquiatría en la Universidad de Gante (Bélgica). A lo largo de su carrera ha combinado la práctica clínica con una intensa labor formativa y divulgativa, siendo:

  • Fundador y presidente del Foro Internacional para la Formación en Psicoterapia

  • Presidente de la Sociedad Española de Medicina Psicosomática y Psicoterapia

  • Presidente de Honor de la Federación de Asociaciones de Psicólogos y Médicos Psicoterapeutas de España (FAPyMPE)

Su enfoque se sitúa dentro de una visión integradora y humanista de la salud mental, donde los síntomas no se entienden como fallos aislados del cerebro, sino como expresiones de un malestar más profundo, vinculado a la historia personal, emocional y relacional de cada individuo.

El problema de la medicalización del malestar

Según el Dr. Marín, uno de los grandes errores actuales es haber rebajado el umbral de lo que se considera enfermedad mental. Tristeza, ansiedad, frustración, duelo o vacío existencial —experiencias humanas universales— son diagnosticadas con rapidez como trastornos que requieren medicación.

“Hemos confundido el sufrimiento con la patología”, afirma el Dr. Marín.

En este contexto, los antidepresivos se convierten en una respuesta automática, sin una evaluación profunda de las causas reales del malestar.

Este fenómeno se ve reforzado por una cultura que exige bienestar constante y rechaza cualquier forma de dolor emocional. El resultado es lo que el propio Marín denomina la “dictadura de la felicidad”: una presión social que empuja a silenciar el sufrimiento en lugar de comprenderlo.

Psicoterapia antes que fármacos: una cuestión clínica y ética

El Dr. Marín no niega la utilidad de los antidepresivos. Reconoce que pueden ser necesarios y eficaces en determinados casos, especialmente en depresiones graves o cuadros clínicos bien definidos. Sin embargo, advierte del riesgo de utilizarlos como primera y única respuesta.

Desde su experiencia clínica, muchos pacientes que reciben antidepresivos:

  • No presentan una depresión mayor estructurada

  • Podrían beneficiarse de psicoterapia breve o focal

  • Utilizan la medicación como una forma de “anestesiar” conflictos no resueltos

En estos casos, el fármaco puede reducir síntomas, pero no aborda el origen del problema, retrasando procesos de comprensión, elaboración emocional y cambio personal.

El enfoque biopsicosocial: entender a la persona, no solo el síntoma

Uno de los pilares del pensamiento del Dr. Marín es el enfoque biopsicosocial, que integra dimensiones biológicas, psicológicas y sociales. Desde esta perspectiva:

  • El cuerpo y la mente están profundamente conectados

  • Muchos síntomas psicológicos se expresan a través del cuerpo (somatización)

  • El sufrimiento tiene sentido dentro de la biografía de cada persona

Este enfoque, ampliamente trabajado en la medicina psicosomática, invita a escuchar el síntoma como un mensaje, no como un error que deba eliminarse de inmediato.

Implicaciones para profesionales y pacientes

Las reflexiones del Dr. José Luis Marín plantean retos importantes para la práctica clínica actual:

  • Revisar de forma crítica el uso prolongado de antidepresivos

  • Priorizar la psicoterapia como tratamiento de primera elección en casos leves o moderados

  • Evitar diagnósticos simplistas que no tengan en cuenta el contexto vital

  • Acompañar el sufrimiento con escucha, tiempo y comprensión

Para pacientes y profesionales, este enfoque supone recuperar una mirada más humana, menos reduccionista y más respetuosa con la complejidad del malestar psicológico.

Una reflexión necesaria en el contexto actual

El aumento del consumo de psicofármacos, especialmente antidepresivos, no puede entenderse solo como un avance médico. Tal como señala el Dr. Marín, también es el reflejo de una sociedad que tolera mal el sufrimiento y busca soluciones rápidas.

Reabrir este debate no implica rechazar la medicación, sino utilizarla con criterio clínico, ética profesional y una comprensión profunda de la persona. En este sentido, la psicoterapia sigue siendo una herramienta fundamental para abordar el malestar emocional de forma duradera y transformadora.